Elementos de protección personal para pies y extremidades inferiores

Elementos de protección personal y/o individual para los pies.

Se cree que el calzado existe desde aproximadamente el fin del paleolítico (10.000 AC.) debido a que existen pinturas donde se muestra cómo se trabajaba el cuero (y más específicamente el calzado). Era muy común caminar descalzo y utilizar los zapatos únicamente en caso extremo (al salir de casa).

Ya entonces, el zapato no sólo se utilizaba para proteger los pies, sino que era un símbolo que marcaba diferencias entre los seres humanos; en Egipto, únicamente el faraón y los dignatarios estaban autorizados a llevar calzado.

En Grecia, eran los hombres libres los que utilizaban zapatos, mientras que en Roma los esclavos andaban siempre descalzos y los criminales lo hacían llevando pesados zapatos de madera, en esta época, el calzado más usado era la sandalia, aunque también comenzaros a proliferar otras variantes de calzado (las botas); fueron los griegos los que empezaron a adaptar los zapatos a todo tipo de pie y actividad para guerreros, sacerdotes y nobles.

Esta variedad en el calzado adoptada por Grecia será generalizada por Roma, donde el significado del zapato se amplía y se convierte en símbolo de estatus o en amuleto para la buena suerte.

En Roma el calzado indicaba la clase social y, los cónsules por ejemplo usaban zapatos blancos, los senadores zapatos marrones prendidos por cuatro cintas negras de cuero atadas con dos nudos, y el calzado tradicional de las legiones eran los botines que descubrían los dedos.

En la Edad Media se produce un cambio en el uso que se le da al calzado. Una vez generalizado su uso por parte del pueblo, el significado simbólico desaparece y comienza a cobrar fuerza el gusto por lo estético. Dicho de otra forma, el zapato empieza a ser un elemento fundamental para ensalzar las virtudes o tapar los posibles defectos en los pies.

En esta época empiezan a ser los personajes públicos los que marcarán la moda.

Gracias al desarrollo industrial imperante en el siglo XIX aparecen nuevos modelos y formas de fabricar calzado. Ya a finales de los años 30 comienza a adquirir fuerza el botín, al igual que se crea el cubre zapatos o polaina.

Con los años 50 llega el tacón de aguja o stiletto, que vuelve a ser de nuevo alto y sutil, mientras que el zapato bajo llamado «bailarina» se difunde a través de medios masivos como el cine (Audrey Hepburn los calzaba en «Sabrina»).

Será una década más tarde cuando regresen los zapatos altos, mocasines, altas plataformas y poco a poco se va mostrando una tendencia que es la que marca las últimas décadas del siglo XX y el propio presente la diferente variedad de calzado.

Un zapato para cada momento y para cada persona.

Las características del calzado de uso profesional están determinadas, de forma general, por los materiales de fabricación empleados (por ejemplo, cuero, caucho, etc.), formas o diseños del mismo y de los elementos de protección incorporados al equipo (como topes de seguridad, suela de aislamiento, etc.).

Básicamente existen tres tipos de calzado de uso profesional:

Calzado De Seguridad (ofrece protección frente al riesgo de impacto al menos de 200 Joules y compresión al menos 15 kN) lo que significa energía.

Calzado De Protección (ofrece protección frente al riesgo de impacto al menos de 100 J y compresión al menos 10 kN)

Calzado De Trabajo (no garantiza protección contra el impacto ni compresión en la parte delantera del pie).

Recomendaciones Al Momento De Elegir Calzado Laboral

En el mundo del calzado laboral hemos pasado de calzados pesados y robustos a modelos que son ligeros y cómodos, más tipo bamba laboral. Una de las ventajas de los nuevos modelos de calzado es que las punteras son de composite y por lo tanto no pesan. A su vez, las plantillas son mucho más flexibles y se adaptan mejor a la pisada. Antes de escoger cualquier calzado laboral debemos tener en cuenta estos factores:

Escoge un calzado de un buen material: invertir en la salud de tus pies es fundamental, ya que pasamos muchas horas en el trabajo. Es fundamental para la salud de nuestra espalda y piernas contar con un buen calzado de trabajo.

Ten en cuenta la horma del calzado: este es un aspecto al que no se le da importancia, pero es importante. No todos tenemos los pies igual de anchos, por eso es importante tener en cuenta la horma, especialmente si tenemos el pie muy ancho o fino.

Material: este aspecto es fundamental ya que no todos los materiales son adecuados para todos los sectores. Es importante saber escoger el material adecuado para no deteriorar el calzado antes de tiempo.

Normativa: muchas veces escogemos el calzado por el diseño y no por su funcionalidad. En calzado laboral es importante tener presente la normativa que necesitamos para que el calzado cumpla en nuestro día a día.

La talla: hay una creencia generalizada de coger una talla más para el calzado laboral. No obstante, esto no es bien así. En los nuevos modelos de calzado laboral, recomendamos escoger siempre la talla que habitualmente se utilice. En caso de estar entre dos tallas, escoger siempre la más grande ya que en laboral no hay medios números.

Tipos y Clase De Calzado De Seguridad.

El protagonista de la seguridad en los pies son los zapatos, entre ellos una serie de referencias de acuerdo al tipo de labor a desarrollar, en las más comuniones nombramos algunos de ellos.

Calzado De Seguridad Integral: También llamados zapatos de seguridad o zapatos industriales. Es un calzado para uso profesional que cubre la región de los dedos con un tope o puntera de seguridad que protege contra el impacto con una energía equivalente a 200 julios y frente a la comprensión con una carga de 15 Kilonewtons.

La nomenclatura para el calzado de seguridad integral es SB que a su vez se subdivide en función de los requisitos adicionales que cubra el zapato.

Calzado De Seguridad S1: El tipo de calzado de seguridad S1 debe ser resistente al plegado, resistente a la corrosión, en el caso que la puntera de seguridad fuera metálica.

Trasera cerrada, propiedades antiestáticas, absorción de energía en el talón, resistente a hidrocarburos.

El uso de este tipo de calzado de seguridad está recomendado para electricistas, mecánicos, artesanos, entre otros. Y dentro de este, nos encontramos con el calzado de seguridad S1P.

Calzado De Seguridad S2: Entre las características de los zapatos de seguridad S2 además de contar con todo lo que hemos mencionado en los S1 se añaden la resistencia a la penetración y a la absorción de agua también pueden ser de caña alta.

Es ideal para ambientes con elevados niveles de humedad como puede ser trabajos de almacenaje y transporte en la industria alimentaria, actividades de construcción, por mencionar algunos.

Calzado De Seguridad S3

Por su parte los tipos de botas de seguridad industrial categoría S3 reúnen las cualidades de sus predecesores y añade:

Resistente a la perforación de la plantilla de seguridad cuando se le suministra una fuerza equivalente a 110 Kilogramo/fuerza.

Resistente a la corrosión en el caso que la plantilla de seguridad fuera metálica.

Suela con relieve.

Todas estas cualidades convierten al calzado de seguridad S3 ideal para las condiciones de trabajo más adversas, por ejemplo, como zapatos de seguridad en minería, en el sector de agricultura, para las fábricas o en la construcción.

Adicionalmente existen las categorías S4 y S5 las cuales están destinadas a las botas de plástico para trabajar por lo general fabricadas en goma o material PVC y empleadas en ambientes líquidos.

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